El Inicio: Un análisis dentro de una escena citadina
Antes que nada, agradecer a Solaris por la invitación, es un placer para mi hacerlo.
- El/La oficinista sin aspiraciones: Triste pero cierto, este personaje ataviado en vestuario formal, que cabizbajo toma el transporte resignado al atardecer; solo piensa en las deudas contraídas por los excesos cometidos que le ofreció la fantasía de pertenecer a una clase media, existente en la formalidad pero un fantasma en la realidad de las personas. Generalmente su edad oscila entre los 25 a los 50 años. Para cerrar esta definición, cabe mencionar que quienes entran dentro de esta categoría son los miembros de empresas y gobierno, indistintamente. Para aparentar viene siempre con audífonos
- La ama de casa: Acompañada sin duda alguna de sus hijos, la encontraremos con ropa sencilla, adecuada para las labores que realiza día a día. Sus preocupaciones son el aspecto alimenticio y moral, así como la telenovela de moda, o la revista de chismes de su preferencia. Es un personaje abundante dentro de las instalaciones del transporte público y siempre la veremos con una bolsa, ya sea del mandado o de mano. Un personaje hasta cierto punto inocente.
- El obrero: Comparte algunas características del oficinista, como la resignación ante la que toma el transporte, y la preocupación por las deudas, a diferencia del oficinista, conoce bien su realidad, y ha perdido toda aspiración por una superación.
- El estudiante: Personaje distraído, en lo general, vive absorto dentro de su propia vida; sus preocupaciones son de índole social, pocos relacionados con la escuela o la realidad en la cual se encuentra, no es una generalidad, pero muchos de los actores de este papel encajan dentro de esta descripción.
- El vendedor del metro: Personaje clave, que ha agarrado fuerza de 10 años para acá, se encarga de dar color, aunque de una forma no apropiada. Se puede creer que aparte de este trabajo forma parte de la delincuencia, cosa que no podemos asegurar.
- El mendigo: Varias presentaciones y colores caracterizan este personaje, ya sea niño, niña, señora, anciano, no importa, clásico no solo del metro sino de la ciudad misma, producto del desarrollo industrial mal planeado y de la ruptura y abandono de las tradiciones. Generalmente son explotados cruelmente por alguien que vive a costillas de lo que generan.